Imagen original en: http://panda-with-oar.deviantart.com/art/Captain-Descartes-426493365 |
Pero tuvo el inconveniente de que el cogito, ergo sum (pienso, por lo tanto, existo) solo le dejaba con la certeza de su pensamiento, pero no de la existencia de lo material. Hasta tal punto rompe el mundo en dos que ni siquiera la materia corporal del mismo Descartes está asegurada como unida a su pensamiento. "Sí", dirá, "mi cuerpo es res extensa y mi pensamiento res cogitans, por tanto, están separadas; pero se unen entre sí por la glándula pineal". (¿Y por qué no por el hígado, Descartes, por decir algo elegante?)